la cosa empezó con algún gallo, alguna afonía, finalmente me metieron un cable por la nariz, hasta llegar a la laringe, a las cuerdas. Allí está el objeto, el pólipo a ser extirpado (la tele en que me lo mostraron era casi objeto de museo, como estamos, pachi¡¡¡). Por un lado quiero comenzar aquí un petit blog dentro del blog que me lleve por el silencio necesario tras la intervención. Ha coincido con el fenómeno 15M. No sé en qué quedará la cosa. Una fibrolaringoscopia parece ser que necesita nuestra sociedad, extirpar el pólipo, una temporadita de silencio, y una rehabilitación en el uso de la palabra
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